PODER VER VER PODER

identidad personal: real vs. virtual (press start to game over)

“Como si de un videojuego se tratara, me autorretrato
retratando a la vez el peso de la huella digital en nuestra sociedad.”

PODERVER,VER PODER reúne las inquietudes de la vida contemporánea donde el ser humano se ve afectado por el irrumpir frenético de la tecnología. La identidad de las personas reales deja paso a la identidad digital. La obra nace de un sueño que tuvo la artista en el que las personas se relacionaban entre si exclusivamente a través del uso de hologramas, y sus imágenes eran más o menos definida dependiendo del poder que tenían y del dinero que poseían.

Con este proyecto Mura abre un diálogo sobre la visibilidad, la reputación y la privacidad en Internet y piensa en lo que induce y lo que provoca a las personas vivir en la sociedad de la Red. Por elllo reflexiona sobre la necesidad de adquirir rápidamente las habilidades necesarias para la gestión de la identidad virtual. Un aprendizaje entre divertido e inquieto, que implica una inmersión total en la cultura digital a lo largo de la vida del ser humano, donde el ciberespacio parece sobreponerse cada vez más al espacio real.

La marca que deja el uso y el tratamiento de nuestra identidad en Internet está formada por el comportamiento que tenemos en la red (qué decimos, dónde y porqué) y puede influir cada vez más en la vida real. El conjunto de informaciones publicadas Online sobre nuestra persona compone la imagen que los demás tienen de nosotros: datos personales, imágenes, noticias, comentarios, gustos, amistades, aficiones, etc. influyen sobre nuestra reputación online. Esta última, más allá de la imagen que queremos proyectar, está también compuesta por las noticias, comentarios y opiniones expresadas por terceros en redes sociales, foros, blogs y medios digitales. Para conocer estos datos podemos realizar el egosurfing. La manera más sencilla de hacerlo es googleizarnos, es decir, buscar nuestro nombre y apellidos en el buscador Google.

EL DÍPTICO cual representación tangible del holograma del sueño, muestra la imagen del rostro impresa en la tela, como si de un sudario se tratara. El oro, símbolo de resiliencia*, se enfrenta esta vez a la dicotomía entre poder y perdida representando a la vez dinero y pobreza, vida y muerte. La resurrección del pixel enseña finalmente la capacidad de la imagen para recuperar su estado inicial.

EL VÍDEO presenta una estructura circular que le permite ser proyectado en loop. El paisaje sonoro que lo acompaña ha sido compuesto combinando distintos sonidos bits, para generar efectos sonoros reconocibles (start – money – power – win – mistake – lose).

* Capacidad de adaptación